En el marco del proyecto „Elementos para la Recuperación Industrial“, cuyo objetivo es garantizar la reutilización de espacios industriales obsoletos en la ciudad, Studio BURR ha reutilizado un antiguo almacén de alimentación y bebidas en Madrid. El híbrido vivienda/trabajo se caracteriza por la interconexión de las distintas estancias, que se adosan como cubos y resultan del esqueleto de los muros de mampostería del antiguo almacén revocados con mortero de cal. El espacio, luminoso e inundado de luz, se complementa con estructuras de madera que integran estanterías y escaleras y contrastan con las paredes totalmente blancas y parcialmente alicatadas. Un toque de color lo aportan los muebles, sencillos pero a veces coloridos, que dan vida a la estancia. En cuanto al estilo, se ha optado por los clásicos del siglo pasado, como el sillón de dos plazas Togo, del diseñador Michel Ducaroy, o la silla de diseño Orange Slice, de Pierre Paulin.
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