Arkitekturskolan - La nueva Facultad de Arquitectura
En calidad de becaria, Anna-Lena Bodendörfer prestará apoyo a Urban Design en Estocolmo durante las próximas seis semanas. En su tiempo libre, explora la capital sueca, que tiene un 30% de agua. Por eso presenta cada mes un proyecto que refleja los tres componentes de Estocolmo: Arquitectura, tierra y agua. Empieza por el campus del Real Instituto de Tecnología.
La primera parada del recorrido por la tierra y el agua nos lleva al norte de Estocolmo, al campus del Real Instituto de Tecnología. Allí se inauguró en 2015 el nuevo „Arkitekturskolan“ en medio de los edificios de ladrillo existentes, en parte catalogados, diseñados por el arquitecto Erik Lallerstedt. El edificio, de forma orgánica, no destaca realmente entre los edificios de ladrillo. El estudio de arquitectura sueco „Tham & Videgård Arkitekter“ colocó el edificio en el centro de un patio interior existente. La forma parece haber sido elegida para aprovechar al máximo el espacio de la parcela triangular.
El semestre comienza en Suecia a mediados de agosto, por lo que muchos estudiantes de los edificios universitarios vecinos acudieron al lugar durante la visita. Pero no de la Facultad de Arquitectura, que está cerrada debido a la situación actual. Sin embargo, tuve la suerte de que un estudiante de arquitectura me diera acceso.
Estudios abandonados
La distribución diáfana también contiene curvas, creando zonas interesantes. Hay talleres en el sótano y estudios en los niveles segundo, tercero y cuarto. Los puestos de trabajo están dispuestos a lo largo de las ventanas que rodean la escalera orgánica/centro de la sala contigua. Cuando recuerdo mi época en los estudios de la Universidad de Núremberg, solían estar muy concurridos. El material de modelado estaba esparcido por todas partes y cada pequeña zona estaba ocupada. Ahora es extraño ver los estudios tan vacíos y desiertos, a pesar de que hace tiempo que empezó el semestre.
A pesar de la amplitud de los estudios, se echa de menos una zona que se pueda utilizar libremente según las necesidades. Por ejemplo, para comer juntos o socializar con otros estudiantes. Esto se debe a que no hay comunicación entre las tres plantas de estudios. Por muy bonitas que sean todas las zonas abiertas para trabajar y socializar, es evidente que no son aptas para coronavirus.
La Academia Baumeister es un proyecto de prácticas de la revista de arquitectura Baumeister y cuenta con el apoyo de GRAPHISOFT y BAU 2019.