La creciente urbanización y el auge del comercio minorista en línea plantean nuevos retos a la logística urbana. La congestión del tráfico, la contaminación ambiental y los elevados costes de entrega ejercen presión sobre las ciudades y sus habitantes. Al mismo tiempo, aumentan las expectativas de los consumidores en cuanto a opciones de entrega rápidas y flexibles. Las soluciones logísticas automatizadas, como los drones y los robots de reparto, ofrecen enfoques innovadores para superar estos retos. Mediante el uso de las últimas tecnologías, las ciudades pueden construir cadenas de suministro más eficientes, respetuosas con el medio ambiente y centradas en el cliente.
Dato curioso: según un estudio de McKinsey, los robots de reparto y los drones podrían hacerse cargo de hasta el 80 % de todas las entregas de paquetes en zonas urbanas de aquí a 2030.