El Gran Melià Palazzo Cordusio, originalmente conocido como Palazzo delle Assicurazioni Generali, es un magnífico testimonio de la historia arquitectónica de Milán. Tras una profunda renovación, ahora brilla con nuevo esplendor. Construido originalmente a finales del siglo XIX según los planos del célebre arquitecto Luca Beltrami (1854-1933) y utilizado anteriormente como sede de Generali Assicurazioni, ahora ha sido reformado. Parte del edificio se ha convertido en un lujoso hotel. Esta remodelación combina de forma impresionante la sustancia histórica con el diseño contemporáneo y crea una simbiosis única de historia y hospitalidad moderna.

El Palazzo Venezia de Milán brilla con una nueva luz.
Restauración artística y uso moderno
El Palazzo Venezia, como también se conoce al edificio, fue construido originalmente por la compañía de seguros Generali entre 1897 y 1901. El palacio está situado en la Piazza Cordusio de Milán, donde constituye el edificio principal, por así decirlo. Con su ecléctica fachada de curvas cóncavas, domina la plaza central del centro de la ciudad. Para quienes encargaron la renovación era importante preservar el edificio como parte de la memoria colectiva y el patrimonio histórico de Milán. La renovación y restauración del Gran Melià Palazzo Cordusio corrió a cargo del Studio Marco Piva, responsable de la dirección artística y de la cuidadosa remodelación de las zonas catalogadas. El objetivo era preservar la integridad histórica del edificio al tiempo que se integraban funciones modernas. El resultado es una armoniosa combinación de pasado y presente.
Los trabajos en el exterior del edificio abarcaron la magnífica fachada, la zona de entrada, las terrazas e incluyeron también un nuevo concepto de iluminación para la piel exterior del edificio. Las obras se llevaron a cabo en estrecha colaboración con el restaurador y la autoridad supervisora. Se decidió utilizar principalmente métodos de restauración conservadora para no destruir el carácter arquitectónico, artístico e histórico del edificio.
El diseño interior del hotel consta ahora de 84 habitaciones -originalmente estaban previstas unas 70- y numerosas zonas comunes. El estudio Marco Piva consiguió preservar los elementos estructurales del edificio mediante medidas de conservación específicas y adaptó los espacios interiores a las nuevas necesidades del hotel. Esto requirió numerosas intervenciones estructurales y técnicas, incluida la sustitución de todos los ascensores existentes y la creación de nuevos cuerpos de ascensor. Además, se realizaron aberturas en los muros de carga para garantizar una distribución eficaz de los pasillos hacia las habitaciones de los huéspedes en todas las plantas.
Conexión e integración: Palazzo Venezia y Palazzo Cassi-Ramelli
Conectar el edificio principal del Palazzo Venezia con el vecino Palazzo Cassi-Ramelli, en Via Mercanti, planteó un reto particular. Estos dos palacios, que originalmente no se había previsto que pertenecieran juntos, se armonizaron arquitectónicamente para trasladar partes del uso hotelero al edificio vecino. El resultado es una integración perfecta de las zonas comunes, como las salas de conferencias y el gimnasio, inundadas de luz gracias a grandes ventanales y una pared de cristal.
El magnífico patio interior y la importante cúpula del tejado
Un elemento destacado de la renovación es el patio interior restaurado del Gran Melià Palazzo Cordusio, que originalmente se utilizó como establo de caballos y más tarde como aparcamiento. Se ha mejorado con una llamativa estructura de acero y cristal que se eleva sobre la segunda planta. Este concepto de sala multifuncional puede utilizarse para eventos, conferencias o como sala de desayunos. La estructura de cristal del tejado, sostenida por pilares de acero, es sísmicamente independiente del edificio y está formada por ventanas de alto rendimiento.
Las plantas superiores del Gran Melià Palazzo Cordusio albergan las zonas de restaurante y bar, situadas en los amplios espacios de la azotea, bajo la cúpula del edificio. La arquitectura de estas zonas sigue la pendiente natural del tejado inclinado existente y ofrece una transición fluida a las zonas exteriores vecinas. Además, se creó una exclusiva zona de spa y bienestar en el sótano, que se complementa con una piscina y diversas instalaciones de bienestar.
Conservación de la escalera monumental y la cúpula
La monumental escalera del Gran Melià Palazzo Cordusio, revestida de mármol Rosa Asiago y Verdello, ha sido restaurada con especial cuidado. El histórico portal „Generali Assicurazioni“ de la segunda planta se ha conservado en honor al antiguo uso del edificio. La cúpula, el elemento arquitectónico más destacado del edificio, se restauró con un enfoque sensible, dejando al descubierto el estucado original y las estructuras metálicas de soporte. Bajo la cúpula, la iluminación se diseñó para resaltar respetuosamente las estructuras y superficies históricas de madera.
Iluminación moderna para un esplendor histórico
La iluminación técnica del Gran Melià Palazzo Cordusio ha corrido a cargo de Platek, un experimentado especialista en iluminación exterior. Se han instalado más de 400 fuentes de luz para iluminar de forma impresionante las fachadas y los interiores del hotel, tanto de día como de noche. Las soluciones de iluminación incluyen la serie Mini Corniche, que proporciona una iluminación no invasiva y resalta los detalles arquitectónicos del edificio. El sistema de iluminación es regulable y programable para crear diferentes escenas luminosas para ocasiones especiales y celebraciones. La iluminación precisa de las fachadas y los patios crea impresionantes escenas nocturnas y ambienta eficazmente diversos actos y conmemoraciones.
Con esta amplia renovación, el Gran Melià Palazzo Cordusio no sólo ha conservado su importancia histórica, sino que ahora también ofrece modernas comodidades en un entorno arquitectónicamente único. El edificio representa una acertada combinación de tradición e innovación y sienta nuevas bases para la renovación de edificios históricos en Milán.
Fotos: Ottavio Tomasini