La ciudad escocesa de Paisley está desarrollando planteamientos para una regeneración impulsada por la cultura del antiguo centro textil. ¿Cómo puede la ciudad cambiar a través de la cultura y servir de ejemplo a otras?
De imperio textil a ciudad postindustrial
Paisley es una ciudad escocesa cercana a Glasgow de 77.000 habitantes. Posee un impresionante patrimonio arquitectónico que se remonta a la riqueza industrial de los siglos XIX y XX. La próspera industria textil de la ciudad se vio impulsada durante mucho tiempo por el auge del estampado paisley, un diseño conocido en todo el mundo. Originario de Asia, el estampado se hizo muy popular en Europa en el siglo XIX, gracias a los tejedores de Paisley. Ellos lideraron la producción de los famosos y ornamentados pañuelos.
El papel de la ciudad como centro textil mundial continuó en el siglo XIX, cuando sus fábricas de hilo se convirtieron en un imperio mundial. J&P Coats Ltd, con sede en Paisley, fue en algunos momentos la tercera mayor empresa del mundo. Otras empresas, desde Robertson’s Jam hasta el automóvil Hillman Imp, también contribuyeron al éxito económico de Paisley. Sin embargo, el declive de la ciudad comenzó en el siglo XX, cuando la fabricación se trasladó al extranjero y muchos de los molinos y otras empresas de la ciudad se vieron obligados a cerrar.
Al mismo tiempo, siglos de éxito económico dejaron en Paisley un importante legado, que incluye una excelente colección de arquitectura victoriana, una próspera universidad, una activa escena cultural y una inclinación por las soluciones creativas: „La creatividad que hizo famosa a Paisley sigue presente en el ADN de la ciudad“, afirman los organizadores* de la exposición Future Paisley.