Sala de las Columnas, Chennanna Basti
Dietrich Fink
1667 D.C.
En su libro „Reminiscencia“, Benedict Esche y Benedikt Hartl retratan la especial relación entre edificio y arquitecto. En él, arquitectos pioneros dan su opinión, escribiendo sobre su huella arquitectónica y la influencia de ésta en su propia obra. Aquí, Dietrich Fink, de Fink + Jocher, habla de un encuentro con un lugar de pura presencia:
„Un amigo que enseña en la academia de arte de Bangalore me llevó a Shravanabelagola hace años. La pequeña montaña cercana a la ciudad es un lugar sagrado para los jainistas. Hace más de mil años, se talló una estatua en la roca de la cima de la montaña. El poder de la estatua de Gomateshvara, de casi 20 metros de altura, y la magia de su culto espiritual son inmensos. Sin embargo, me fascinó aún más una sala con pilares, construida como lugar de reunión y oración, que está algo escondida pero no muy lejos de la estatua. A primera vista, se asemeja a los modelos helenísticos, pero carece de cualquier exceso de modelado artificial. Sin mediación alguna, las vigas horizontales de piedra se enfrentan a las irregularidades del terreno. Pasé el resto del día a la sombra del tejado, un lugar de pura presencia, alejado de cualquier idea narrativa“.
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