La diferencia de temperatura entre las zonas urbanas y rurales es un fenómeno bien conocido que tiene consecuencias de gran alcance para la planificación urbana y la arquitectura paisajística. Este llamado „efecto isla de calor urbano“ (UHI) se basa en varios factores que son especialmente pronunciados en las zonas urbanas.
Las zonas densamente edificadas, las superficies selladas y la falta de zonas verdes provocan una diferencia significativa de temperatura entre las zonas urbanas y las rurales. Estrategias como los tejados verdes, los materiales de colores claros y una planificación urbana bien pensada ayudan a reducir estos efectos y a hacer más habitables los espacios urbanos. Foto de Andreas M en Unsplash
Causas de la diferencia de temperatura
- Elección del material y sellado: las superficies de asfalto, hormigón y tejados oscuros absorben más radiación solar durante el día y la vuelven a liberar lentamente por la noche. Como resultado, los espacios urbanos se calientan más que las superficies expuestas de forma natural.
- Geometría de los edificios: los edificios densos y los estrechos cañones de las calles impiden la radiación sin obstáculos del calor y reducen la circulación del aire. Esto contribuye al almacenamiento de calor.
- Falta de vegetación: las zonas verdes refrescan a través de la evaporación y la formación de sombras. Estos efectos refrescantes suelen faltar en las zonas urbanas.
- Fuentes de calor antropogénicas: El tráfico, la industria y los sistemas de aire acondicionado emiten calor continuamente y contribuyen así al aumento de la temperatura.
- Contaminación atmosférica: En las zonas urbanas hay más partículas en la atmósfera que absorben la radiación térmica y contribuyen al calentamiento.
Efectos de la diferencia de temperatura
El aumento de las temperaturas en las ciudades tiene importantes repercusiones en la calidad de vida y el medio ambiente:
- Peligros para la salud: Las altas temperaturas pueden ser especialmente problemáticas para los ancianos y las personas con enfermedades preexistentes. Las olas de calor en las ciudades suelen provocar un aumento de la tasa de mortalidad.
- Aumento de las necesidades energéticas: los sistemas de aire acondicionado y refrigeración funcionan durante más tiempo y con mayor intensidad en las zonas urbanas, lo que se traduce en un mayor consumo de energía.
- Alteración de los ecosistemas: El aumento de la temperatura puede afectar al crecimiento de las plantas y a la migración de los animales y reducir la biodiversidad en las zonas urbanas.
- Aumento del estrés térmico en barrios socialmente desfavorecidos: Estas zonas suelen tener menos espacios verdes y zonas de sombra.
Estrategias para minimizar la diferencia de temperatura
Para reducir la diferencia de temperatura son necesarias medidas de planificación específicas:
- Los tejados verdes y el reverdecimiento de las fachadas mejoran la evaporación y reducen la temperatura ambiente.
- Eldesprecintado y la integración de espacios verdes favorecen el equilibrio hídrico y enfrían el ambiente por evaporación.
- Los materiales de colores claros y las superficies reflectantes reducen el calentamiento de edificios y plazas.
- Una planificación urbana inteligente con calles anchas y plazas bien ventiladas favorece la circulación del aire.
Los arquitectos paisajistas y urbanistas desempeñan un papel decisivo a la hora de minimizar los efectos de la diferencia de temperatura y diseñar espacios urbanos habitables mediante conceptos bien pensados y materiales sostenibles. La combinación de vegetación, materiales reflectantes y estructuras urbanas bien pensadas puede tener un importante efecto refrescante a largo plazo.
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