Optamos por una forma especial del bloque de vidrio clásico: un bloque de vidrio trapezoidal cuyos lados están inclinados cinco grados hacia arriba. Los elementos individuales pueden colocarse directamente unos encima de otros, de modo que no hay juntas de mortero visibles.
El resultado no es una superficie plana de vidrio, sino un plano tridimensional a escala. Además del efecto visual, los bloques de vidrio también mejoran la acústica del pasillo. En combinación con el suelo de terrazo gris claro, las paredes de hormigón visto y un techo continuo de fieltro, el pasillo, que bordea el patio interior accesible, tiene un carácter impresionante.
Para conseguir la calidad acústica necesaria en las salas de sintonización y los pasillos, el diseño y la elección de los materiales fueron
Los materiales se diseñaron y seleccionaron en estrecha colaboración con acústicos especializados (Kahle acoustics).
Además de superficies acústicamente eficaces en el techo y las paredes, todas las salas de canto están equipadas con una cortina acústica circundante. Esto permite personalizar la acústica de la sala en función de su uso. Las cortinas aportan acentos visuales de color entre los colores predominantemente sutiles y las superficies naturales. La elección de colores para las cortinas y el resto del mobiliario de la sala de conciertos se basa en un concepto cromático del diseñador Oliver Klimpel.
Junto al patio interior del edificio trasero se encuentra el vestíbulo de los artistas, prácticamente la pieza central de las salas para los músicos. La sala se extiende por las dos plantas y ofrece espacio para celebraciones y reuniones informales de los músicos antes o después de la actuación. Gracias al mobiliario ligero, los músicos pueden utilizar la sala con flexibilidad. Al igual que las salas de afinación, la sala está enmarcada por una cortina que va del suelo al techo.
Actualmente estamos trabajando, entre otras cosas, en el diseño del vestíbulo. También en este caso queremos combinar la elegancia de una sala de conciertos con el encanto urbano y una cierta ligereza contemporánea.
Está previsto que la construcción de la sala de conciertos comience en 2021. Esperemos que la crisis del coronavirus no lo retrase demasiado. En cualquier caso, estoy impaciente por ver cómo evolucionará el paisaje cultural de Núremberg gracias a la nueva sala de conciertos. Quizá la arquitectura moderna y contemporánea anime a las nuevas generaciones a volver a asistir a conciertos de música clásica en el futuro.
Todas las imágenes: super future collective/johannes kappler/topotek 1